
Cuando el anuncio terminó y yo esperaba que pasaran a la siguiente propuesta, aún asqueada por lo que había visto, veo que comienza de nuevo. Apagué la tele, claro. Desde luego, si lo que quería era relajarme para poder dormir, había puesto el canal equivocado, ya que, a partir de ese momento, lo único que oía en mi dormitorio eran ruiditos sospechosos que me mantuvieron en vela hasta las seis de la mañana, en que creo que, agotada, me quedé dormida.
Cuando me desperté y fui consciente de lo que había visto, me dije que era mejor visitar a alguien que viviera en una chabola que visitar a una amiga en el centro de la ciudad en su magnífico ático. En el primero tenía la plena seguridad de que el único bicho viviente que iba a encontrar era al propietario de la chabola, pero en la segunda iba a ser recibida por una enorme cucaracha reina de pie, vestida de frac que me abriría la puerta y me conduciría al interior flanqueada por unos magníficos ratones, lacayos impertérritos, hasta la sala principal donde se encontraría mi amiga, sentada en un magnífico chester, herencia de su abuelo, con su enorme perro correteando detrás de todos sus "congéneres".
Aún así, me dije: ¿Por qué no ir a visitarla? Lo único que tenía que hacer era llevarle un regalo: una batería de Pes Res y asunto solucionado; le desaparecerían todos los "inquilinos molestos", como decía el anuncio, y ella volvería a resplandecer de alegría.
Te cuento esta historia porque me acordé de tu insomnio. ¿No será que tienes esos inquilinos molestos y no te has dado cuenta? Podría ser muy, pero que muy factible, ya que te pasas tocando el piano muchas horas y el ruido no te deja oír lo que está pasando en el submundo de tu casa. Pregúntate si lo que me comentabas el otro día acerca de la sonoridad del piano que te parecía que lo estabas encontrando un poco sordo, no será porque dentro tienes a unos pequeños roedores que están comiéndose los martillos o brincando entre las cuerdas. Siento decírtelo, pero revisa, y revisa bien, ya que si es así, tiene solución: Pes Res en todas partes.
He mirado en internet y el nombre correcto es Pest Reject. Da igual, a mi en español me sonó más fácil de la otra manera.
Besos a montones (ponle música a esta despedida y verás qué bien suena).
Ana
... eres tremenda al cubo. Francis está muerto de risa con tus cosas. Dice que le recuerda a un pasaje de la metamorfosis pero en versión eléctrica. Le gusta la cucaracha disfrazada de Drag Queen (Maxi le da su versión del disfraz).
ResponderEliminarYo, estoy maravillada de lo bien qué escribes. Insisto, apúntate en todos los concursos de literatura, verás que tarde o temprano te llevarás un premio.
Mil besos desde la isla de LA GRAN CANARIA!!!!